Que tiene Ronaldo que no tenga yo?

Dos dias despues de mi “boda” partimos los tramites para volverme “legal”. Vamos para los 3 meses y todavia nado en el limbo de la (i)legalidad, en medio de tantas versiones como personas atienden en las distintas ventanillas.
Todo parecia mas facil, pero la primera caida llego despues de un mes de la primera gestion (huellas digitales y palmares por partida doble). Tenia que volver.
Uno de los burocratas del lugar comento al pasar que la nueva “tecnologia de punta” que habian estrenado en diciembre (la misma de los actuales carnet de identidad, implementada en Chile unos 36 meses antes), presentaba “complicaciones”.
Un mes despues, ventanilla nueva, chica neurotica (que no se hizo ningun problema en gritonear al arabe(?) delante mio en la fila porque la maquinita recien estrenada para capturar huellas no funcionaba), nuevas huellas y nueva fecha, esta vez el “permiso de residencia” tenia fecha: 28 dias despues (ea!).
Fantastico, dijimos. Esto de ser inmigrante clase “A” –porque no es lo mismo ser trabajador o estudiante que “casado con”- hace todos los procesos mas simples, decian.
15.45 del 28 de febrero. Misma ventanilla, chica nueva. “Estamos atrasados con los permisos. Por culpa del nuevo sistema desde Roma nos han llegado muy pocos permisos… veamos… ups!... el suyo no esta. Le doy nueva fecha… 12 de abril (!!!???)… mucho tiempo?... no… solo 40 dias… no, no puede viajar…”.
A esas alturas la salud mental comienza a hacer agua y la ubicacion del “tercer mundo” en el mapa, poco clara.
“Existe una circular que obliga a las instituciones del Estado a continuar el proceso” (es decir, hacer la residencia, el codigo fiscal, la tarjeta de salud, etc.) me explica la amiga de una amiga, que trabaja en inmigracion.
Demosle entonces, me dije. Registro Civil, extranjeria. Nueva ventanilla, vieja fea. “La residencia… la residencia?... no, imposible. Primero el permiso”… “pero… y la circular?”… “no, imposible”… “pero me dijeron…”… “no”.
“Pero el codigo fiscal puedes hacerlo”. Ese lo hacen todos, hasta lo extracomunitarios ilegales y claro, con ese se puede trabajar y, por ejemplo, dejar el curriculum en las agencias.
Demosle de nuevo, en algo se avanza. Mesa de informaciones de la central de Impuestos Internos Italianos. Viejo semi pelado… “si, si… con fotocopia de pasaporte, pero en la direccion de su domicilio”... bien, algo es algo. Lunes siguiente, Impuestos Internos de mi domicilio. Yo sonrriente: todos los papeles de la espera de “el papel”, fotocopia de mi pasaporte, el papel de solicitud, mesa de informaciones, viejo con lentes que ni siquiera me mira…”permiso?”… “no, en la Central me dijeron…”, “no, solo con el permiso”… “y la circular…” “no, vuelva con el permiso”… “…ANDATE A LA CONCHA DE TU MADRE!!!”
Y donde entra Ronaldo?... el dia de la chica neurotica, el futbolista brasileno (tan extracomunitario como yo, aunque mucho mas guaton, que por esos dias fichaba para el Milan) salio de una de las oficinas de inmigracion mientras yo hacia la fila. Extranamente fui la primera en reconocerlo, despues todos los emocionados extracomunitarios de la sala.
Me pregunto si el permiso de residencia de el -comenzado la misma fria tarde de enero que el mio- tambien estara para el 12 de abril.